
No se pierdan nuestro artículo sobre la edición de julio en la página 29 de la revista Tube & Pipe:
“Lo que DieTronic ha estado desarrollando en los últimos 15 años de actividad es una solución completa frente al conocido problema de la oxidación en tubos: un problema bastante frecuente para los fabricantes de tubos, particularmente común durante el transporte y largos periodos de almacenaje al aire libre con grandes cambios en temperatura. En este sentido, la oxidación es un problema que implica como consecuencia una mala calidad del producto que puede llevar, en el peor de los casos, a tener que rechazar una gran cantidad de producción.
Para evitar esto, DieTronic ha diseñado una solución anticorrosiva completa, que comprende limpieza de bobina, limpieza de tubo soldado, sistema de pulverización Antirust y unidad de lubricación de la sierra de corte.
El primer dispositivo propuesto es el sistema de limpieza de bobina (Coil Cleaning) que, colocado antes de la sección de formación del tubo, asegura la limpieza de la bobina gracias al uso de un rodillo superior e inferior con cepillos giratorios. La unidad siguiente, ubicada después de la sección de conformado y soldadura, es el sistema de limpieza del tubo (Tube Cleaner), que permite una primera limpieza profunda, especialmente importante para tubos muy sucios, mediante el uso de solventes o productos a base de agua; a continuación se suele disponer siempre de un lama de aire (Air Knife) neumático, colocado en la entrada del sistema Antirust, que sopla aire directamente sobre el tubo, preparando una superficie perfectamente limpia y seca, optimizando así la posterior aplicación de fluidos anticorrosivos.
Tras estos tres primeros útiles accesorios, entra en juego la máquina de pulverización Antirust: el sistema ha sido concebido y mejorado a lo largo de los años para aplicar el aceite anticorrosivo (RPO) de forma automática y precisa, gracias a la posibilidad de fijar la cantidad deseada de producto anticorrosivo en g/m2 (de 0,5 a 10 g/m2) desde el panel operador, de una forma muy fácil e intuitiva.
En este sentido, el Antirust es capaz de pulverizar la cantidad justa de producto de forma constante y homogénea, cubriendo toda la superficie del tubo y ajustando la cantidad de RPO para aplicar de forma automática y proporcional a la velocidad de la línea, detectada gracias a la presencia de un encoder.
Como resultado, el sistema no solo otorga una excelente calidad de aplicación y una protección completa del tubo contra la oxidación, sino que también disminuye de manera consistente el consumo de fluidos anticorrosivos, que se puede reducir hasta en un 80% gracias a su diseño distintivo.
Para mejorar aún más las características de esta herramienta única, el objetivo principal de este año es el lanzamiento de un nuevo Antirust con algunos aspectos innovadores, siguiendo la tendencia de la industria de fabricación 4.0.
Síganos para más actualizaciones sobre el Antirust 4.0 y no pierdan la edición de Tubos y Tuberías de noviembre, con especial centrado en la técnica de Lubricación de Cantidad Mínima (MQL) para la Sierra de Corte.”